Dentro de las causas de la obesidad se ha encontrado que la ingesta o alimentación es una variable muy importante e influyente al momento de mencionar el desarrollo de la obesidad ya que, como bien se conoce es de vital importancia el control de la nutrición en la calidad de vida de todo ser humano.
McArdle, Katch y Katch (1990) señalan que "hasta hace poco, se creía que la causa principal de la obesidad era el comer demasiado, y por ello la manera más fácil de reducirla sería disminuir la cantidad de comida consumida”. Sin embargo si esto fuera sencillo, la obesidad no sería un problema principal de salud en el mundo, pero evidentemente operan otros factores tales como influencias genéticas, ambientales y sociales.Hamburger, (1951, citado en Gempeler, 2002), “intento determinar las posibles causas de la sobreingesta, entre las cuales destaco cuatro: la sobrealimentación como respuesta a tensiones emocionales no especificas, como sustituto gratificante en situaciones vitales intolerables, como síntoma de enfermedad mental subyacente y como adicción a la comida”.
Con relación a la sobrealimentación como respuesta a tensiones emocionales algunos autores consideran que son una reacción a los fuertes prejuicios sociales y a la discriminación lo cual conduce a inseguridad extrema y malestar intenso ante ciertas situaciones sociales”. (Montaño, 2007).
Otras causas asociadas a la obesidad son la depresión y la ansiedad que se encuentran relacionadas con la ingesta de alimentos; también se ha planteado el sedentarismo como otro factor importante en el desarrollo y mantenimiento de esta enfermedad.
